Tartitas de manzana en forma de flor

Hola lectores!

Para celebrar que estamos a las puertas del fin de semana os traigo un nuevo postre, preciosísimo en presentación, fácil de hacer y con un resultado muy rico! Se trata de unas tartitas individuales de hojaldre y manzana que había visto en muchos blogs y libros y que hace poco me dispuse a preparar.

Os cuento en detalle los secretos para elaborarlas 🙂 .

Ingredientes (para 4 tartitas):

• 1 ó 2 manzanas (de cualquier clase)
• 2 ó 3 cucharadas de mermelada de albaricoque
• 1 masa de hojaldre rectangular
• azúcar normal
• zumo de limón (1 chorro)
• agua
• azúcar glass
• canela (opcional)

Preparación:

Comenzamos lavando bien las manzanas y cortándolas por la mitad, quitándoles el corazón. Con un cuchillo las vamos laminando muy finitas, y las vamos introduciendo en un bol con agua y el chorro de zumo de limón. Cuando terminemos de laminarlas todas, introducimos el bol en el microondas durante 5-7 minutos. Este paso lo hacemos para ablandar las manzanas y que al formar las flores no se rompan.

Mientras están las manzanas en el microondas vamos precalentado el horno a 200º con calor arriba y abajo.

Asimismo, en un papel de horno estiramos bien la masa de hojaldre ayudándonos de un rodillo. Cuanto más la estiremos más fina y tierna quedará, y es esencial en esta receta. Cortamos con un cuchillo la masa en 4 trozos alargados, y la pintamos con la mermelada de albaricoque diluida en un poquito de agua. Espolvoreamos por encima un poco de azúcar:

Una vez tengamos las láminas de manzana semicocinadas, las escurrimos y las vamos poniendo sobre el hojaldre una al lado de la otra, dejando que sobresalgan bastante:

Doblamos el hojaldre sobre las manzanas:

Y enrollamos con cuidado:

Repetimos la operación con los otros trozos de masa y los vamos metiendo en moldes de magdalena/cupcake (individuales o de los múltiples como el mío):

Metemos en el horno durante 30-40 minutos, hasta que veamos el hojaldre un poco tostadito.

Espolvoreamos con azúcar glass y canela si queremos y servimos enseguida, a poder ser con un buen helado de vainilla.

Os prometo que vuestros invitados alucinarán!

Hasta la próxima!!! 😉