Hola amig@s, empezamos nuevo mes, nada menos que Noviembre ya!
Hace unas semanas pasamos unos días en Mallorca. Veraneo en la isla desde que nací, por lo que le tengo un cariño súper especial… Ir en una estación distinta del verano te hace descubrir una cara de la isla que no tiene nada que ver: montana, campo, interior, paseos urbanos, pueblecitos preciosos… y los restaurantes en ellos escondidos…
En uno de estos restaurantes (prefiero no dar el nombre porque no estuvimos contentos con el trato) nos sirvieron una crema que, nada más probarla, supe que tenía que replicarla en casa… Madre mía, qué sabores más intensos, y qué reconfortante para estas épocas del año!!!
Además es súper nutritiva, se hace en un pispas, solamente hay que juntar los ingredientes, esperar y triturar, sin sofritos previos ni nada!
Ingredientes (para 4 raciones generosas):
- 200 gr de lentejas rojas o amarillas (os recomiendo estas porque no requieren remojo, pero podéis poner lentejas normales, habiéndolas dejado en remojo unas 10 horas)
- 1 lata de tomate entero pelado (400 gr aprox)
- 1 cebolla
- 2 tallos de apio
- 1 zanahoria
- Opcional: 1 pechuga de pollo entera – queda genial ponerla laminada sobre la crema; además, de este modo tenemos un plato único súper completo y saciante!
- Opcional: 100 ml de nata de cocinar, o de leche evaporada tipo “ideal”
- 1 cucharadita de sal
- Agua (luego veremos cantidad)
Preparación:
Simplemente debemos juntar todos los ingredientes (incluida la pechuga de pollo entera) en una cazuela, olla express, thermomix o Crockpot, cubrir todo con agua 2 dedos por encima, y dejarlos cocinar tapados:
- Cazuela: 30-40 minutos, hasta que todo esté tierno
- Olla express: 20 minutos (ya sabéis que el tiempo cuenta desde que suben todos los aros, momento en el cual debemos bajar a fuego medio)
- Thermomix: si vais a añadir el pollo, lo pondría salpimentado en el recipiente varoma; en cualquier caso, programaríamos 30 minutos temperatura varoma velocidad 1.
- Crockpot: 6 horas en baja.
Transcurrido ese tiempo, sacamos la pechuga y trituramos todo lo demás hasta obtener una textura súper cremosa.
Laminamos el pollo y lo reservamos para servir sobre la crema en cada plato (como en la foto inicial).
Listo!
➡ Veréis que espesa con el paso del tiempo. Si os parece demasiado espesa, poned más agua y corregid de sal.
➡ Como todas las cremas, se conserva unos 4 días en la nevera, y se puede congelar (aunque para tener la textura cremosa de siempre deberemos calentarla en un cazo, o bien triturarla de nuevo una vez descongelada)