Quiche lorraine 2.0

Hola amig@s!!!

La quiche es uno de esos platos que gusta a todo el mundo, sobre todo la lorraine, que es la más conocida (la de bacon de toda la vida). Ese olor inconfundible a bacon horneado es una delicia…

La pena de esta quiche es que la tradicional tiene 2 inconvenientes.

Un inconveniente (que es común a todas las quiche) es que, a no ser que preparemos la masa en casa (cosa que generalmente da pereza), las industriales suelen tener unos ingredientes un poco chunguillos, y en la mayoría de casos no aportan demasiada gracia al resultado. La otra pega que le encuentro es que no lleva nada de verdura, y ya sabéis que nuestra dieta debe estar basada en un 50% de verduras!

Total, que el otro día se me ocurrió preparar una sin masa y metiendo verduras en ella (por ello la he titulado “2.0”). El resultado? Una delicia que no he dudado en compartir!

Animaos porque triunfará seguro!

Nota: si queréis ver otras recetas de quiche  de mi blog, os las dejo en este link.

Ingredientes (para 4-5 raciones):

  • 1 paquete de bacon en taquitos (unos 150 gr; también serviría bacon en láminas, que deberemos trocear)
  • 2 puerros
  • medio manojo de espárragos trigueros
  • 3 huevos
  • 1 brick de nata líquida (de la de cocinar)
  • 1 pizca de nuez moscada
  • pimienta al gusto
  • Pizca de sal
  • aceite de oliva

Preparación:

Comenzamos pochando puerros y espárragos. Para ello previamente debemos lavarlos muy bien y trocearlos muy pequeñitos. Los ponemos en una sartén amplia con un chorro de aceite y dejamos pochar a fuego medio 10 minutos.

Precalentamos el horno a 180 grados con calor arriba y abajo.

En un cuenco grande mezclamos los huevos, la nata, la sal, la nuez moscada, la pimienta, y después añadimos el bacon y el puerro+espárrago ya pochados.

Vertemos esta mezcla en un molde (redondo, rectangular o de corona; si no es de silicona recordad que debemos engrasarlo bien para que no se pegue) y metemos en el horno.

En principio en 35 minutos puede estar lista la quiche, comprobadlo metiendo un cuchillo en medio y si sale limpio podéis sacarla del horno; de lo contrario, dejad otros 10 minutos o hasta que salga limpio.

Servimos caliente, templada o fría, preferiblemente acompañada de una ensalada sencilla.

Lista!!!

Carne en salsa de setas y orejones

Hola amig@s!

Esta receta fue el plato principal que serví en una cena hace poquito (como el paté marinero express que tanto os ha gustado). A los que me seguís por Instagram, os sonará la foto, ya que os di el parte de tooodo lo que tomamos 🙂 .

Es un guiso de carne súper sencillo y ligero pero a su vez sabroso y especial como para servir a invitados, gracias a la combinación de las setas y la fruta desecada.

En cuanto a la pieza de carne, yo puse contramuslos de pollo (me gustan mucho porque siempre quedan tiernos!), pero no dudéis en utilizar otro tipo de carne como solomillo (de pavo o cerdo), o muslitos de pollo si es para hacer en casa un día cualquiera.

Ya veréis qué fácil es!!!

Ingredientes (para 4 raciones):

  • 8 contramuslos de pollo (sirven otras carnes como solomillo de cerdo o de pavo, simplemente calculad para que haya unos 150-200 gr de carne por persona, limpia de pieles y hueso)
  • media cebolla grande
  • 2 dientes de ajo
  • 100 gr de orejones o ciruelas secas (cualquier fruta desecada que os guste)
  • 200 gr de setas variadas (pueden ser de las congeladas)
  • 1 chorro de vino fino o blanco para cocinar
  • aceite de oliva
  • 1-2 cucharaditas de sal

Preparación:

Comenzamos dorando la carne en una cazuela o sartén amplia, con un chorro de aceite y a fuego medio-alto. Cuando esté dorada una cara (OJO, no pretendemos que quede cocinada por dentro, luego la terminaremos de hacer en la salsa), damos la vuelta para que quede dorada por todas partes. Pasamos la carne ya dorada a un plato, de momento.

Picamos la cebolla y el ajo.

En esa misma cazuela o sartén pero a fuego más bajo, ponemos un poco más de aceite y doramos cebolla y ajo con la sal durante 7 minutos, removiendo de vez en cuando.

Mientras, descongelamos las setas (si eran congeladas) en el microondas.

Agregamos las setas (sin el líquido de descongelación, pero no lo tiréis porque lo añadiremos después) y subimos a fuego fuerte para que pierdan su agua y se cocinen un poco, 5 minutillos.

Incorporamos el agua de descongelado de las setas, el vino y la fruta desecada que hayamos escogido y dejamos que se cocine 3 minutos a fuego fuerte con la tapa abierta.

En este momento podéis decidir si triturar la salsa (total o parcialmente, yo trituré parte de ella) con una batidora. Si lo hacemos, la reincorporamos a la cazuela de nuevo.

Agregamos a la cazuela la carne que habíamos dorado y tapamos para que se termine de cocinar en ella, unos 10 minutos es suficiente pero id viendo. Si lo veis con poca salsa, agregad más agua y pizca más de sal.

Y lista!

➡ Os recomiendo servir este rico guiso acompañado de arroz (os dejo aquí mi receta express) u otro cereal, o bien puré de patata.

Banana bread

Hola amigos!!!

Por aquí os traigo la segunda receta de esta temporada!

Tengo que reconocer que esta receta no es nueva del todo, ya que hace 3 años compartí con vosotros mi primer banana bread, peeero como hace poquito lo he vuelto a preparar, he decidido reeditar la receta con las mejoras y compartirla de nuevo 🙂 .

Empecemos explicando su nombre, ya que puede llevar a confusión. Se llama banana bread, pero es en realidad un bizcocho y no un pan. No me preguntéis la razón de lo anterior, porque por más que la he buscado no la he encontrado jejeje.

Una cosa interesante de esta receta es que se prepara con plátanos muy maduros (de esos que ya no te apetece comerte y que podrían acabar en la basura), y gracias a los cuales el bizcocho apenas necesita que agreguemos azúcar/endulzante.

Otro punto a favor de mi receta respecto a los bizcochos tradicionales es que vamos a utilizar harina integral (yo os propongo de avena, que no es más que copos de avena triturados, pero puede ser de cualquier cereal!), y por tanto tiene más fibra y nutrientes.

Y es que, amig@s, no debemos olvidar que la repostería tradicional, casera o no, no es lo más saludable del mundo (sus ingredientes no aportan demasiado valor nutricional a nuestro cuerpo, y ya si tienen azúcar son incluso perjudiciales), y por tanto no está de más intentar retocar las recetas para que sean un poquito mejores desde el punto de vista nutricional.

Vamos allá!!!

Ingredientes (para 1 molde rectangular):

  • 2 plátanos medianos muy maduros
  • 2 huevos y 2 claras (o 4 huevos en total)
  • 3 dátiles grandes o 2 cucharadas soperas de azúcar
  • 120 gr de harina de avena (o copos de avena finos de los de porridge; ambos lo venden ya en la mayoría de supermercados, incluido mercadona), o bien cualquier otra harina integral
  • 1 cucharadita de levadura (impulsor, la royal de toda la vida) – opcional, simplemente considerad que si no lo ponemos quedará muy apelmazado
  • para decorar (opcional pero recomendable): 2 onzas de chocolate o unas cuantas pepitas, 2 nueces…

Sigue leyendo Banana bread

Paté marinero express

Hola lector@s!!!

Tras un descansito por aquí (que no por Instagram, que ahí sí que os he dado el parte diario de mis vacaciones, desayunos, comidas y demás), retomo con muchas ganas mi actividad bloggera 🙂 .

Y la retomó con uno de los entrantes que puse en una cena que hicimos en casa. Se trata de una crema/ paté/ dip con sabor a mar, muy fácil y rápido de hacer y además súper saludable, con contenido potente en hierro, proteína y omega 3.

Acompañadme en este arranque de temporada, que vengo con muchas cosas muy muy ricas, saludables y facilonas!!!

Ingredientes (para un bol de aperitivo):

  • 2 latas de mejillones al natural
  • 1 lata de atún (en aceite de oliva o al natural)
  • 1 huevo duro (o fresco y lo cocemos 10 minutos en agua hirviendo con vinagre)
  • 1 cucharadita de sal
  • medio yogur natural (60 gr aprox)
  •  1 chorrito de vino fino o blanco

Preparación:

Descartamos el líquido de las latas de mejillones y de atún, ya que de lo contrario el paté quedaría demasiado líquido.

Cocemos el huevo si no teníamos ya el huevo duro (ver instrucciones en el listado de ingredientes).

Después, simplemente debemos triturar con una batidora todos los ingredientes del listado hasta obtener una textura cremosa. No importa si quedan trocitos, le da un toque más rústico.
En thermomix serían 20 segundos a velocidad 7-10.

Servimos con pan tostado, pitas o palitos de zanahoria.

 

 

Risotto de pesto

Buenos días amig@s!

No sé por qué nunca habíamos sido muy de tomar pesto en casa, y desde hace unos meses no paramos de preparar cosas con esta deliciosa salsa! Nos encanta porque alegra cualquier plato sosillo, desde una simple pasta hasta una carne sencilla, una ensalada, un bocadillo, yyyy un risotto! Además, otro punto a su favor es que se puede preparar bastante a ojo y con ingredientes variados (no tiene por qué ser necesariamente con piñones ni con albahaca, luego veréis). Y también que, ahora que algunos estamos en modo pre-vacacional, es genial para aprovechar plantas de albahaca que no podremos regar, restos de ajo, de parmesano, el típico medio limón que ronda por la nevera… Porque el pesto se puede congelar y queda tal cual, sabíais???

Veréis en la receta que incluyo guisantes en el propio pesto (triturados): os cuento. Lo vi en una revista y pareció una idea fantástica, ya que sabía que los guisantes no iban a alterar el sabor del pesto pero sí que lo dotarían de un aporte de proteína interesante, perfecto para incluir en platos poco proteicos como arroces o pastas. Pero OJO, si preferís podéis omitir los guisantes y sustituirlos por más albahaca, rúcula o espinaca, os aseguro que el sabor no se distingue.

Al lío!

Ingredientes (para 4 raciones):

  • 350 gr de arroz para risotto (carnaroli, arborio)
  • media cebolla
  • 2 dientes de ajo
  • Aceite de oliva
  • 1 chorro de vino blanco o de cocinar
  • 1 cucharadita de sal
  • 1 litro de agua o caldo de verduras de calidad (luego veremos cantidad exacta)
  • opcional: 8 espárragos trigueros

Para el pesto:

  • 5 cucharadas soperas de guisantes congelados o cocidos en conserva (100 gr aprox) – opcional pero recomendable para darle más proteína al plato, tened en cuenta que vamos a triturarlos osea que no se van a apreciar
  • 1 puñado generoso de alhabaca fresca
  • 1 puñado generoso de frutos secos o pipas a vuestro gusto
  • 1 chorro generoso de aceite de oliva
  • Zumo de medio limón
  • Pizca de sal
  • 4 cucharadas soperas de queso parmesano/grana padano rallado

Preparación:

Comenzamos preparando el pesto, ya que lo pondremos inmediatamente en cuanto el arroz esté terminado y no habrá tiempo que perder!

Para ello, si decidimos incluir los guisantes y estaban congelados los coceremos 5 minutos en agua hirviendo, y los escurriremos. Después, solo habrá que triturar todos los ingredientes con una batidora e ir probando por si nos gustase más fuerte (añadir más parmesano, ajo, albahaca, sal) o menos (añadir agua o aceite). Reservamos para más tarde.

 

Proseguimos picando cebolla y ajo en cuadraditos pequeños. Los ponemos a pochar con la sal y un chorro de aceite en una cazuela lo más amplia y baja que podamos. A fuego medio 7 minutos tapado pero removiendo de vez en cuando.

Ponemos a calentar el agua o el caldo en un cacito o en el hervidor si es solamente agua.

Incorporamos el arroz y dejamos que se dore un poquito, 3 minutos.

Agregamos el vino y subimos a fuego fuerte para que se evapore el alcohol.

Ponemos 2 cazos del agua o caldo y removemos a fuego medio-bajo. Cuando se absorba volvemos a añadir otro cacito del agua o caldo caliente, y así tantas veces como sea necesario hasta que el grano de arroz esté tierno pero sin pasarse.

Para terminar, apartamos la cazuela del fuego e incorporamos el pesto que habíamos preparado antes. Removemos bien y dejamos que repose 2-5 minutillos.

Podemos mientras saltear unos espárragos trigueros enteros e incorporarlos al risotto troceados, no es imprescindible pero dan un sabor y textura muy ricos.

Listo!

Truco maravilloso si queréis dejarlo hecho con antelación: haced todo igual pero dejad el arroz a medio hacer (el grano aun un poco duro) y el pesto guardado por separado. Cuando vayáis a comer, simplemente habrá que volver a calentar el arroz en la cazuela y seguirlo hidratando con caldo/agua, y mezclarlo con el pesto al final, como indico en la receta.

➡ Los risottos pierden mucho en textura recalentados o congelados, pero el sabor sigue siendo el mismo (es decir, si sobra no lo tiréis porque está muy rico, pero tampoco hagáis grandísimas cantidades a propósito porque queda ideal).

Crema fría de calabacín, yogur y hierbas (en 6 minutos!)

RECETA REEDITADA

Buenos días amig@s!

Hace apenas un año estuvimos de fin de semana en París… Madre mía, lo que han cambiado las cosas en este tiempo, ahora ir a París (que lo tenemos a 3 horas en coche de Luxemburgo) suena casi como imposible…

En dicho viaje, como en tantos otros, hice uno de mis planes preferidos que es entrar en alguna gran librería y rebuscar para acabar llevándome algún libro especial. En esta ocasión acabé no con uno sino con 2, ambos sobre recetas (sorprendente, eh? Jejeje).

De uno de ellos procede la receta que comparto hoy y que tanto disfrutamos el año pasado: se trataba de un libro de sopas y cremas, dividido por estaciones del año y con un diseño precioso.

Estoy segura de que os va a encantar la crema: es hipercremosa y fresquita a más no poder, tanto por la temperatura como por las hierbas que le vamos a añadir. Además, se prepara rapidísimo porque no hay que cocer los ingredientes! Probadla y me decís…

Ingredientes (para 4 raciones generosas):

  • 2-3 calabacines (700 gr – 1 kg)
  • 200-250 gr de yogur natural sin endulzar / queso fresco batido (2 yogures de tamaño normal)
  • Imprescindible: hierbas frescas a vuestro gusto y en abundancia (yo puse menta/hierbabuena, pero también admite otras como albahaca, cilantro, eneldo… os recomiendo elegir solamente una variedad)
  • media cucharadita de sal
  • agua (puede que no sea necesaria)

Preparación:

Antes de triturar todo y dejarlo enfriar, conviene que ablandemos ligeramente el calabacín, para que tenga una textura más sedosa y agradable y se digiera mejor.

Para ello, los lavamos (no es necesario pelarlos) y los cortamos en 5 trozos cada uno. Los hacemos al vapor en un estuche tipo Lekué (unos 5 minutos pueden ser suficientes), o bien los cocemos en abundante agua hirviendo con sal. Esta agua la podemos guardar para cuando trituremos todo.

Una vez ablandados los calabacines, los dejamos templar un ratito.

Después, los trituramos a tope (1 minuto a velocidad progresiva 10 en thermomix) con los demás ingredientes del listado. OJO, respecto al agua, empezad ni poniendo nada o bien poniendo muy poquita, ya que el calabacín contiene mucha agua y el yogur también aporta líquido. La idea es obtener una crema, valga la redundancia, muuuy cremosa!

Metemos en la nevera hasta que esté bien fresquita, y a disfrutar!!!

➡ Si os habéis decantado por ponerle albahaca, podéis servir la crema con parmesano espolvoreado por encima, o incluso en lascas, queda genial!

➡ Se conserva bien 4-5 días en la nevera.

 

Helado de chocolate (instantáneo y saludable)

Hola querid@s!

Maaaadre mía qué calor hace en todas partes, ni yo en Luxemburgo me libro!!!

El post de hoy es tan fácil que me da incluso vergüenza llamarlo receta jejeje.

No obstante, está tan rico y sorprende tanto al que lo prueba que he decidido publicarlo para inspiraros para vuestras meriendas veraniegas. De hecho, voy a incluirlo en el post recopilatorio de meriendas que compartí hace unos meses (os dejo el link por si os lo perdísteis).

Vamos al lio!

Ingredientes (para 2 raciones):

  • 3 plátanos congelados (no está de más tener siempre plátanos congelados – pelados y cortados en 2-3 y metidos en bolsita de plástico, sirven para helados y smoothies cremosos!)
  • 1 cucharada sopera de cacao puro en polvo (no nesquick ni colacao, esto es puro cacao, lo venden ya en cualquier supermercado)
  • Leche al gusto (ver debajo)
  • Opcional: 1 cucharada sopera de mantequilla de algún fruto seco o tahini
  • Para servir (opcional): nibs de cacao o pepitas de chocolate

Preparación:

Simplemente hay que triturar todos los ingredientes con una batidora hasta obtener una textura cremosa y homogénea de helado. Empezad poniendo muuuy poca leche (o nada) e id agregando si veis que lo necesita para quedar cremoso.

En thermomix, 10 segundos a velocidad 5, abrimos, bajamos lo que ha quedado por las paredes y volvemos a triturar 5 segundos a velocidad 10.

Servimos inmediatamente, espolvoreando si queremos nibs de cacao o pepitas de chocolate.