Cebollas rellenas de atún con tomate

 

Ingredientes (para 4 raciones):

  • 5-8 cebollas (en función del tamaño, cuanto más grandecitas mejor)
  • 2 dientes de ajo
  • 3 latitas de atún al natural (200 gr aprox en total) – si sólo lo encontráis en aceite, también sirve
  • 6 cucharadas de tomate frito
  • 2 huevos
  • 1 chorro de vino blanco (cualquiera para cocinar)

Preparación:

Comenzamos vaciando las cebollas. Primero las pelamos y les cortamos una tapita de un tamaño que nos permita rascarlas por dentro. Las vamos vaciando con una cucharita vaciadora (las que se utilizan también para hacer bolitas de melón), aunque si no tenéis podéis hacerlo con una cuchara y cuchillo (y muuucha paciencia).

El relleno que vayáis sacando, lo pasáis a una cazuela mediana con un chorrito de aceite pero sin calentar aún (lo utilizaremos para la salsa y para el relleno).

Una vez tengamos todas las cebollas vacías, las colocamos en un estuche de vapor tipo Lekué (yo utilicé uno que venía con el microondas). Otra opción es hornearlas envueltas en papel de horno. En el microondas se hacen en 12 minutos, en el horno serían unos 30 a contar desde que está precalentado a 200 grados.

Encendemos el fuego donde está la cazuela  con la cebolla y añadimos el ajo picadito y una cucharadita de sal. Los dejamos asó 10 minutillos removiendo de vez en cuando.

Mientras, ponemos a hervir los huevos en agua fría con vinagre 12 minutos ( a contar desde que empieza a hervir el agua).

Cuando estén los huevos, los pelamos y picamos y los pasamos a un cuenco.

En ese cuenco echamos 2 cucharones de la cebolla pochada, las latas de atún escurridas y la salsa de tomate. Mezclamos bien.

A la cazuela de la cebolla le agregamos 2 cucharadas de tomate frito o bien 1 tomate natural troceado y dejamos 2 minutos a fuego fuerte. Incorporamos el vino y dejamos otro minuto para que se evapore el alcohol. Apagamos el fuego.

Sacamos las cebollas del microondas/horno y, con una cucharita y mucho cuidado, las rellenamos con la mezcla de atún, huevo etc. Hay que aplastar bien l relleno por dentro para que quede compacto, quepa más y no se desmoronen.

Trituramos la salsa de la cazuela con una batidora. Yo le añadí el agua de cocción de las cebollas, porque queremos una salsa bastante líquida.

La volvemos a poner en la cazuela y colocamos las cebollas en ella con cuidado y separadas.

Dejamos que se terminen de cocinar 30 minutos más, tapadas, a fuego muy muy suave, sin remover demasiado para que no se rompan.

Listo!!!

Marmitako a mi estilo (guiso de garbanzos y salmón)

RECETA REEDITADA

Hola amigos!

Sigo con recetas de sabores tradicionales, en este caso de la gastronomía vasca. Se van acabando las semanas de tiempo fresquito, y seguramente en uno o dos meses no querremos ni ver guisos y platos de cuchara como este, de modo que hay que aprovechar!

Conocéis el marmitako? Es un plato vasco a base de patatas, pimiento y bonito delicioso!

Hace algunos años vi esta receta en el libro La cocina de las legumbres (súper recomendable!!!) y me sorprendió al no contener ni patata ni bonito, pero me apeteció tanto que me puse manos a la obra. Os lo recomiendo muchísimo, es súper sabroso y os arregla un plato único en un pispás (sobre todo si empleamos garbanzos ya cocidos jejeje).

NOTA: Si preferís seguir o conocer la receta tradicional del marmitako, os enlazo la de El Comidista.

Vamos allá chicos!!!

Ingredientes (para 4 raciones):

  • 250-300 gr de garbanzos secos, o 2 botes grandes de garbanzos cocidos
  • 1 cebolla
  • 2 dientes de ajo
  • 1 pimiento rojo
  • 2 lomos de salmón (unos 250 gr en total)
  • 1 pastilla de caldo de pescado o 2 cucharaditas de sal
  • 250 gr de tomate frito o triturado (aprox), o 3 cucharadas de tomate concentrado (en pasta)
  • 1 chorro de vino blanco/fino
  • agua (luego veremos cantidad)
  • pimienta negra
  • aceite de oliva

Sigue leyendo Marmitako a mi estilo (guiso de garbanzos y salmón)

Caldo gallego (con y sin Crockpot)

RECETA REEDITADA

Buenos días a todos!

Esta receta fue de las primeras en aparecer en varianity.es, en 2015! Anda que no ha llovido desde entonces… pero la verdad es que mi adoración absoluta por los guisotes sigue intacta!

En aquella ocasión os daba la receta tradicional pero con un toque especial: el caldo transformado en crema. S bien no hay problema en que lo trituréis al final del proceso, lo cierto es que en casa apreciamos los trocitos y no solemos hacerlo…

Hoy también aprovecho para daros las indicaciones para Crockpot, ya que es el modo que he seguido esta vez y con unos resultados de 10! Os dejo enlazado el post sobre la Crockpot por si os interesa saber detalles sobre ella.

Las recetas tradicionales incluyen «unto», que es un tipo de tocino; no se lo he añadido ya que, como sabéis, trato de aligerar las recetas, y la verdad es que no creo que lo necesite. Pero si os gusta no lo dudéis!

Allá vamos!!

Ingredientes (para 4 raciones generosas):

  • 1 manojo generoso de grelos de unos 200 gr (verdura típicamente gallega, la estrella del plato, los tienen en Hipercor; si no encontráis, poned kale o espinacas)
  • 1 trozo de lacón de unos 200 gr (pedir en la carnicería o charcutería, no es lacón cocido!; si no encontráis, codillo también sirve)
  • 400 gr de alubias blancas cocidas (de bote) – también podéis usarlas secas y vosotros antes
  • 3 patatas medianas
  • Un cuarto de chorizo tipo sarta (también serviría uno o dos chorizos frescos)
  • agua (luego vemos cantidad)
  • 1 cucharadita no muy llena de sal

Seguir leyendo…

Crema de lentejas y tomate

Hola amig@s, empezamos nuevo mes, nada menos que Noviembre ya!

Hace unas semanas pasamos unos días en Mallorca. Veraneo en la isla desde que nací, por lo que le tengo un cariño súper especial… Ir en una estación distinta del verano te hace descubrir una cara de la isla que no tiene nada que ver: montana, campo, interior, paseos urbanos, pueblecitos preciosos… y los restaurantes en ellos escondidos…

En uno de estos restaurantes (prefiero no dar el nombre porque no estuvimos contentos con el trato) nos sirvieron una crema que, nada más probarla, supe que tenía que replicarla en casa… Madre mía, qué sabores más intensos, y qué reconfortante para estas épocas del año!!!

Además es súper nutritiva, se hace en un pispas, solamente hay que juntar los ingredientes, esperar y triturar, sin sofritos previos ni nada!

Ingredientes (para 4 raciones generosas):

  • 200 gr de lentejas rojas o amarillas (os recomiendo estas porque no requieren remojo, pero podéis poner lentejas normales, habiéndolas dejado en remojo unas 10 horas)
  • 1 lata de tomate entero pelado (400 gr aprox)
  • 1 cebolla
  • 2 tallos de apio
  • 1 zanahoria
  • Opcional: 1 pechuga de pollo entera – queda genial ponerla laminada sobre la crema; además, de este modo tenemos un plato único súper completo y saciante!
  • Opcional: 100 ml de nata de cocinar, o de leche evaporada tipo “ideal”
  • 1 cucharadita de sal
  • Agua (luego veremos cantidad)

Preparación:

Simplemente debemos juntar todos los ingredientes (incluida la pechuga de pollo entera) en una cazuela, olla express, thermomix o Crockpot, cubrir todo con agua 2 dedos por encima, y dejarlos cocinar tapados:

  • Cazuela: 30-40 minutos, hasta que todo esté tierno
  • Olla express: 20 minutos (ya sabéis que el tiempo cuenta desde que suben todos los aros, momento en el cual debemos bajar a fuego medio)
  • Thermomix: si vais a añadir el pollo, lo pondría salpimentado en el recipiente varoma; en cualquier caso, programaríamos 30 minutos temperatura varoma velocidad 1.
  • Crockpot: 6 horas en baja.

Transcurrido ese tiempo, sacamos la pechuga y trituramos todo lo demás hasta obtener una textura súper cremosa.

Laminamos el pollo y lo reservamos para servir sobre la crema en cada plato (como en la foto inicial).

Listo!

➡ Veréis que espesa con el paso del tiempo. Si os parece demasiado espesa, poned más agua y corregid de sal.

➡ Como todas las cremas, se conserva unos 4 días en la nevera, y se puede congelar (aunque para tener la textura cremosa de siempre deberemos calentarla en un cazo, o bien triturarla de nuevo una vez descongelada)

Guiso marroquí de legumbres con cordero


Hola amig@s!

Queda inaugurada la temporada de guisos de legumbres!! Yuuuhuuuu!!!

Para celebrarlo, os traigo uno rico rico, que preparé con mi adorada Crockpot (tranquiiiilos, os dejo receta con y sin ella!), y estaba absolutamente de muerte, por no hablar de olor que quedó en la cocina… Se trata de un guiso de inspiración marroquí, tanto por las especias como por incluir carne de cordero. Estas especias se llaman “ras el hanout”, y son las que emplean allí para casi todo (couscous, tajines…). Consisten en una mezcla de varias especias como comino, clavo, canela, jengibre y pimentón – si no tenéis ras el hanout, podéis poner un poco de aquellas!

Otra curiosidad de la receta es que empleé una legumbre poco frecuente pero que podéis encontrar hasta en Mercadona: soja verde o judía mungo. Pese a su nombre, NO es soja, sino una especie de alubia pero muy pequena y de color verde. Yo diría que de sabor es entre una lenteja y un guisante. No obstante, si no tenéis esta legumbre, no dudéis en sustituirla por lentejas, el guiso queda igualmente delicioso! (NOTA: no es la primera receta que comparto con mungo, os dejo el link de la otra, tipo castellano con pimentón etc).

Os dejo la foto de las mungo, y paso directa a explicaros la receta!!!

Ingredientes (para 4 raciones):

  • 250 gr de judías mungo (también llamada soja verde; podéis poner cualquier otra legumbre, por ejemplo lentejas)
  • 2 tallos de apio
  • 1 cebolla
  • 250 gr de cordero (podéis comprar cualquier parte y luego trocearla)
  • 1 cucharadita de sal
  • 1 cucharada sopera de ras el hanout (o bien comino, clavo, canela, jengibre y pimentón)
  • agua (luego vemos cantidad)

Preparación:

Como siempre que cocinamos legumbres, lo primero que debemos recordar es dejarlas en remojo en abundante agua un mínimo de 8 horas (la noche anterior o durante el día).

Troceamos muy pequeñas todas las verduras (lavadas previamente).

Cortamos también la carne en trocitos pequeños.

Receta con cazuela/olla express:

Una vez remojadas las legumbres, las escurrimos y las ponemos en una cazuela u olla express.

Agregamos asimismo los demás ingredientes (la carne y las verduras troceadas, las especias y la sal), y cubrimos con agua del grifo 3 dedos por encima.

Tapamos la cazuela, encendemos el fuego y dejamos que se cocine tranquilamente a fuego medio hasta que la legumbre esté tierna (depende de la legumbres escogida, pero en caso de ser lentejas o judía mungo son unos 25 minutos en cazuela desde que empieza a hervir, o 10 en olla express).

Receta con Crockpot:

Una cosa importante a recordar cuando preparamos alubias en la Crockpot (las mungo son una variedad de alubia) es que es preciso darles un hervor previo para deshacernos de una sustancia que contienen y que solamente desaparece al hervir a borbotones. Para ello simplemente pondremos las alubias en una cazuela, las cubriremos con agua del grifo 2-3 dedos por encima y las pondremos a hervir 5-10 minutos a borbotones.

Hecho lo anterior (recordemos, únicamente aplica si son mungo u otra variedad de alubia), ponemos todos los ingredientes de la receta en la Crockpot (incluido el agua de cocción de las mungo, en su caso) y programamos 6 horas en temperatura baja. Si pasado ese tiempo no estuviesen tiernas, las dejamos 1 hora más.

LISTO!

➡ Podemos conservarlas en la nevera 4-5 días, o congelarlas. Quedan perfectas!

Solet (guiso de alubias húngaro-judío)

Hola amig@s!

Como sabéis los que me seguís por Instagram, en Enero estuvimos de viaje en Budapest. Por cierto, paréntesis, es curioso que con el tiempo que llevamos de aislamiento ya parece increíble que hace tan poquito estuviésemos por ahí moviéndonos como si nada, verdad???

La capital húngara es, para mi gusto, una de las 5 ciudades europeas con más encanto, y ello por muchos motivos: la calidad de los puntos turísticos, la cantidad, la variedad de actividades que pueden realizarse (desde puro turismo de caminar o visitar museos, iglesias etc hasta relajarte en una terma exterior o ir a la ópera por un precio irrisorio…)… Budapest está dividida en 2 por el Danubio (quizá no todos sepáis que el rio divide la ciudad en Buda y Pest!), y eso hace de ella una auténtica preciosidad. Su tamaño también es perfecto para visitarla en 3-4 días, y se puede recorrer entera andando.

Otro aspecto que nos gustó mucho fue la gastronomía. Como buena comedora, cocinillas y demás, la parte gastronómica de los viajes es importante para mí. Trato de acudir a restaurantes que me hayan recomendado o que encuentre en alguna fuente de confianza. La cocina húngara es “muy de guisos”, seguramente os suene el “goulash”, que es un guiso caldoso de carne, verduras y una especie de gnocchis realmente sabroso.

El solet es un plato muy típico de allí también. En su receta original se trata de un guiso de alubias, cebada, carne de ganso y carne de cerdo ahumada, cocinado con grasa de ganso. Un mix que no sé cómo os suena pero estaba delicioso, aunque para casa he preferido adaptarlo aligerarlo y ponerle ingredientes “de cualquier supermercado”. Por ejemplo, sustituimos la cebada por arroz, la grasa por aceite de oliva y la carne por filete de sajonia.

Su origen es judío, y es que en esta religión no pueden cocinar los sábados ya que es su día sagrado. Por ello, lo dejan/dejaban cocinando desde el viernes a fuego suuuper lento de forma que el sábado estuviese recién hecho y aún caliente. De nuevo, esta parte me la salto para reducir tiempos – vamos a utilizar la olla express o bien alubias cocidas de bote.

Animaos, que esta suuuper bueno!!!

NOTA: Si buscas una receta similar pero sin carne, te remito a mi guiso multilegumbre y multicereal.

Ingredientes (para 4-6 raciones):

  • 300-350 gr de alubias secas al gusto (o 2 botes grandes de alubias cocidas)
  • 1 puñado de arroz (mejor integral, podéis poner otro cereal en su lugar como cebada o quinoa)
  • 1 cebolla
  • 2 dientes de ajo
  • opcional: alguna verdura adicional
  • 1 cucharada sopera de tomate concentrado (es una pasta, la venden en casi todos los supermercados y dura siglos en la nevera!)
  • 1 cucharada sopera de pimentón
  • Agua (luego vemos cantidad)
  • Aceite de oliva
  • 1 cucharadita de sal
  • 2 filetes/chuletas de sajonia o cualquier carne ahumada

Preparación:

Comenzamos con las alubias. En función de las alubias que vayamos a emplear:

  • Si vamos a utilizar alubias secas, debemos dejarlas en remojo en agua abundante durante 10-12 horas. Al día siguiente, las ponemos a cocer en una olla express 30 min aproximadamente (cuanto más grandes o antiguas sean, más tiempo necesitarán), simplemente con agua fría del grifo cubriéndolas 3 dedos por encima. Recordad que el tiempo empieza a contar desde que suben los 3 aros y bajamos a fuego medio.
  • Si utilizamos alubias ya cocidas, simplemente las enjuagaremos bien sobre un colador y agua del grifo, hasta que deje de salir espuma. Las escurrimos bien y seguimos con el resto de la receta.

Mientras tanto, vamos con el resto.

Picamos cebolla y ajo muy pequeños (y la verdura adicional en caso de emplearla).

En una sartén, ponemos a calentar un chorro de aceite a fuego medio y doramos la carne un poco. La sacamos y reservamos para más tarde.

En la misma sartén, agregamos la cebolla y el ajo (y, en su caso, la verdura adicional) con la sal y dejamos que poche 7 minutos.

Agregamos el tomate y el pimentón y dejamos otro minuto.

Cuando pase el tiempo de las alubias (si las cocemos nosotros), abrimos la olla express cuando se despresurice. Si véis que hay demasiado líquido, sacadlo a un cuenco pero no lo tiréis por si acaso.

Incorporamos el sofrito anterior a la olla, junto con el arroz y la carne que habíamos dorado volvemos a cerrar para que cocine junto a presión 10 minutos más.

Abrimos la olla y comprobamos que las alubias estén blanditas.

  • Si no lo están o su hay exceso de agua, dejamos que cocine tapado hasta que lo estén.
  • Si está seco, reincorporamos el líquido reservado o agua.

Listo!!!

➡ Se conserva en la nevera 4-5 dias sin problema. También se puede congelar.

Curry ultracremoso de cardo y guisantes

Hola amig@s una semanita más!

Desde hace unos meses tengo un compañero de trabajo procedente de la India. Ya sabéis que una de las cosas que más me gusta de vivir en Luxemburgo es que coincido a diario con gente de todos los rincones del mundo, es impresionante que en mi equipo lo que menos hay son europeos!

Total, que al poco de conocerle empezamos a hablar de comida india y me recomendó algunas recetas que no son las típicas de restaurante. Fui a una tienda de alimentacion de su pais (te recomiendo buscar una en tu ciudad!) y disfruté como una enana simplemente tratando de saber qué eran la mitad de las cosas jejeje.

Pues bien, os traigo la primera de las recetas que he preparado (ojo, tenéis muchísimas recetas indias en este blog, como varios curries o las samosas, si queréis puedo hacer un post recopilatorio!).

Procede del blog «Vegan Richa«, que os recomiendo absolutamente – os dejo también el link a la receta en concreto.

Se trata de un curry («curry» es la palabra que ellos utilizan para referirse a los guisos en general) que no tiene pollo ni langostinos, es vegetal, pero no os preocupéis que, gracias a los guisantes, contiene proteina. Otro toque especial se lo da el cardo o las acelgas, poco frecuentes en los típicos platos de curry que acostumbramos a ver por Europa.

Estaba delicioooooso, animaos a probarlo!

Ingredientes (para 4 raciones):

  • media cebolla
  • 3-4 dientes de ajo
  • 300 gr de guisantes congelados
  • 200-300 gr de acelgas, espinacas o cardo (frescos, congelados o en conserva)
  • aceite de oliva o de coco
  • sal
  • especias:
    • Copos de chile al gusto (para darle un toque picantito)
    • 3 cucharadas soperas de garam masala – o curry en polvo, o bien media cucharadita de las siguientes especias – las que tengáis:
      • Comino
      • Cúrcuma
      • Pimienta negra
      • Jengibre
      • Canela
      • Cardamomo
      • Fenogreco
  • Agua (luego veremos cantidad)
  • 200 gr de arroz basmati o thai como guarnición

Preparacion:

Antes de empezar, vamos poniendo a cocer el arroz siguiendo las instrucciones de su envase.

Ahora vamos con esta suuuper receta!

Comenzamos pelando y picando cebolla y ajo pequeñitos. Los ponemos a pochar a fuego medio en una cazuela con un chorro generoso de aceite y una cucharadita de sal durante 7 minutos.

Agregamos todas las especias y removemos 1 minuto (esto lo hacemos para potenciar bien sus aromas).

Incorporamos los guisantes y las acelgas o equivalentes y dejamos a fuego algo más fuerte 5 minutos mas, removiendo de vez en cuando.

Cubrimos con agua 2 dedos por encima (yo puse más, como se ve en la foto, y para mi gusto me pasé) y dejamos cocinar a fuego bajo durante 10 minutos.

Listo!

Servimos calentito acompañado del arroz. Una LOCURA de sabores, creedme!

Dahl (lentejas estilo hindú)

Muy buenos días amig@s!

¿Habéis oído hablar de los «dhal»?

La semana pasada os mostraba en mi perfil Instagram el que preparé para la semana, estaba taaaan rico y lo hice taaaaan rapido… Es de esas recetas en las que sólo hay que poner todos los ingredientes en una cazuela y esperar a que se haga!

La palabra «dhal» se refiere a una serie de guisos tradicionales de la India a base de legumbres y especias, siendo el más típico el de lentejas («masoor dhal»). Se toman acompañados de arroz o pan naan, como plato único.

Una ventaja de los dhal es que se preparan con lentejas rojas (o amarillas), que al no tener piel no requieren remojo previo, se cocinan enseguida y no producen gases. Aunque quizá no las conozcáis, las venden en muchos supermercados normales incluido Mercadona, en herbolarios o en secciones eco de hipermercados.

A nivel nutricional, los dhal son una pasada, tanto por tener legumbre como por la leche de coco y las especias que se utilizan (la curcuma es muy muy recomendable).

A comeeeer!

Ingredientes (para 4 raciones):

  • 200 gr de lentejas rojas (o amarillas, la cuestión es que sean lentejas sin piel para que no haga falta remojarlas y la cocción sea rápida; las venden en muchos supermercados normales incluido Mercadona, en herbolarios o en secciones eco de hipermercados)
  • 2 dientes de ajo
  • 400 gr de verduras variadas al gusto (frescas o congeladas; os sugiero por ejemplo cebolla, brócoli, pimiento, calabacín, zanahoria, coliflor, espárragos, espinacas… todas quedan genial!)
  • 2-3 cucharadas soperas de curry en polvo, o una mezcla de las siguientes especias (cúrcuma, pimienta negra, comino, clavo, cardamomo, guindilla…)
  • 200 ml de leche de coco (espesa, no “bebida de coco”, normalmente viene en lata)
  • agua (luego veremos cantidad)
  • 1 cucharadita de sal
  • 200 gr de arroz basmati/thai

Preparación:

Lavamos y picamos pequeñas todas las verduras.

En una cazuela grande, echamos todos los ingredientes indicados y cubrimos con agua caliente 3 dedos por encima.

Lo dejamos cocinar a fuego medio-bajo durante unos 30 minutos, removiendo de vez en cuando por si necesitara más agua.

Mientras, cocinamos el arroz siguiendo las instrucciones del fabricante.

Servimos las 2 cosas juntas bien calentitas.

➡ Se conserva genial en la nevera 4-5 días. También se puede congelar.

 

Patatas a la riojana

Hola queridos lectores!

Nunca olvidaré la primera vez que fui a la Rioja. El por entonces novio de mi cuñada (hoy, marido) es de allí y nos invitó a pasar un fin de semana en su tierra. Fui sin ninguna expectativa en especial, más allá de ser una escapadita de fin de semana. En cuanto puse un pie en su casa, ya me estaban agasajando con todo tipo de productos de la tierra: vinos y embutidos para empezar, después pasaron a platos de cuchara procedentes de ollas GIGANTES hechos a fuego lento, y un largo etcétera. Al día siguiente me llevaron a un huerto donde pude coger multitud de vegetales de temporada que me hicieron pensar «qué narices comemos en casa cuando tomamos tomate» jejeje. En fin… me enamoré de esa tierra y de la hospitalidad de mi ahora familia política, y no hay año que no haga lo posible por ir por allí a recargar pilas (y de paso pegarnos el finde gastronómico ya a sabiendas ya jejeje).

Estas patatas fueron el plato que comimos la primera vez que fuimos allí. Como veréis debajo, sus ingredientes son simplísimos y la forma de hacerlas también. Cuanto mejores sean los ingredientes (hay patatas y patatas, y también chorizos y chorizos!), más ricas os saldrán, pero casi más importante aún es que las hagáis a fuego bajo y durante mucho tiempo, para que suelten su almidón y queden taaan cremosas como en la foto. Si no, os doy el truquitruqui al final del post 😉 .

Viva la Rioja!!!

Ingredientes (para 4 raciones):

  • 6 patatas medianas
  • 1 trozo de 5 dedos de chorizo (embutido curado, no del crudo)
  • 2 cucharadas de pulpa de pimiento choricero (opcional pero forma parte de la receta tradicional; lo venden en tarritos de cristal en muchos supermercados)
  • 1 cebolla
  • 3 dientes de ajo
  • 1 cucharadita de sal
  • Agua (luego veremos cantidad)
  • Opcional: 1 cucharadita de pimentón
  • Aceite de oliva

Preparación:

Comenzamos picando la cebolla y el ajo finitos. Los ponemos a pochar en una cazuela amplia con un chorro de aceite a fuego medio durante 5 minutos.

Mientras, cortamos el chorizo en rodajas al gusto.

Pelamos las patatas (opcional) y las chascamos. Chascar significa cortar “a lo bruto”, es decir, clavar el cuchillo por un lado y romperlas. Cortando las patatas de este modo conseguimos que suelten su almidón, quedando el guiso lo espeso que tanto gusta ☺.

Agregamos a la cazuela el chorizo, la pulpa de pimiento choricero y las patatas y dejamos 5 minutos más, para que el chorizo suelte un poco de su jugo.

Cubrimos con agua 3 dedos por encima, echamos la sal y opcionalmente el pimentón y subimos el fuego al máximo. Cuando empiece a hervir, bajamos a fuego suave y dejamos cocinar unos 20 minutos, hasta que las patatas estén muuuy blanditas (las pinchamos para comprobarlo).

Sacamos 2 cazos de patatas con su líquido y trituramos bien. Lo incorporamos a la cazuela de nuevo.

Servimos bien calentitas ☺. Quedan genial con piparras/guindillas en vinagre.

➡ Podemos mantenerlo en la nevera 4 días. Las patatas no quedan bien congeladas…

A DISFRUTARLAS!!!

Caldereta mallorquina (versión aligerada)

Buenos días lector@s!

Hoy os traigo un manjar de los que se disfrutan cocinando y comiendo con tranquilidad. No es que sea difícil ni laboriosa, simplemente no es por definición un plato para unas prisas o de los que consisten en abrir 2 botes y listo 😉 .

Si habéis estado en las Baleares, quizá hayáis podido disfrutar de sus calderetas: las hay de langosta, de pescado, mixta… y son distintas en función de la isla! Hoy os traigo la receta de la versión mallorquina, y es que, después de tantos años yendo allí, hasta este verano no me había animado a preguntar por la receta en el restaurante donde la tomamos jejeje. Pero por fin lo hice y no sabéis cuánto me alegro!

He hecho algunos cambios sobre la receta tradicional para adaptarla a ingredientes habituales y aligerarla un poquito. Eso sí: dos innegociables son la almendra tostada y el anís (ya sea en forma de estrella de anís o en licor, pero no dejéis de ponerlo!), ambos ponen el toque especial de la receta 🙂 .

Ingredientes (para 4-6 raciones):

  • 4 lomos de merluza
  • 500gr – 1 kg de mejillones (peso con cáscara)
  • 1 cebolla
  • 1-2 pimientos (del mismo color o distinto)
  • 3 dientes de ajo
  • 100 ml tomate frito o 2 cucharadas de tomate concentrado
  • Aceite de oliva
  • sal y/o pastilla de caldo de pescado sin glutamato ni grasa de palma
  • pizca de pimentón
  • «Algo» de sabor anisado: 3 estrellitas de anís, 1 cucharada de semillas de hinojo, ramitas de hinojo fresco, un chorro de pastís… al gusto

Para la «picada»: CLAVE

  • 1 puñado generoso de almendras (crudas o tostadas)
  • 1 cucharada sopera de ajo en polvo
  • 1 manojo de perejil fresco

Para servir: OPCIONAL

  • 6 rebanadas pequeñas de pan (mejor blanco para esto)
  • 2 dientes de ajo

Preparación:

Si no venían ya tostadas, tostamos las almendras en la cazuela amplia donde vayamos a preparar el guiso. Simplemente dejemos dejarlas 5 minutos removiendo de vez en cuando para que no se quemen. Las reservamos.

Proseguimos lavando/pelando y picando cebolla, ajo y pimiento en trozos pequeños.

En la cazuela ponemos a calentar un chorro generoso de aceite a fuego medio y ponemos a pochar las 3 verduras y 1 cucharadita de sal.  Lo dejamos 15 minutos tapado, removiendo de vez en cuando.

Pasado el tiempo, agregamos el tomate frito/concentrado y el pimentón, sofreímos 2 minutos y trituramos este sofrito junto con un chorro generoso de agua. Reservamos.

Pasamos a elaborar lo que se conoce como «la picada». Trituramos el perejil, las almendras y el ajo hasta obtener un polvito con trozos.

En la cazuela inicial añadimos más agua y sal/pastilla y el anís o equivalente. Agregamos los lomos de pescado troceados tamaño bocado y los mejillones si los incluimos. Dejamos hervir 5 minutos tapada y removemos.

Por últimos agregamos la picada y dejamos otros 5 minutos sin mover.

Mientras reposa, tostamos el pan en un tostador u horno hasta que esté bastante dorado (no blando) y restregamos cada tostada con un diente de ajo cortado por la mitad.

Lista nuestra caldereta!

Servimos en cada plato una rebanada de pan y por encima vertemos la calderera. ALUCINARÉIS!

Lentejas guisadas estilo Dijon

Hola amigos!

La última vez que estuve en Madrid encontré en casa de mis padres un libro de recetas para olla express del año catapún. Me encanta ojear libros de cocina antiguos, me parece curiosísimo ver los cambios que se han producido con el paso de los años tanto en el estilo de cocinar (ingredientes menos pesados, por ejemplo) como en el propio diseño de los libros (las fotografías, la forma de presentar las recetas…). Encontré multitud de recetas súper interesantes, como la que hoy os traigo.

Reconozco que me cuesta salirme de mis lentejas estofadas de toda la vida (las que llevan choricito y verduras), me encantan y además se preparan solas en thermomix u olla express. Pero esta receta que incorpora mostaza (por eso se llama «al estilo Dijon») y lo que los franceses llaman «bouquet garni» (que no deja de ser laurel, tomillo y perejil) llamó mi atención y me propuse adaptarla a thermomix dado que es así como más me decís que os gusta prepararlas 🙂 .

El resultado es un guiso espectacular y aromático que os gustará 100%.

➡ Podéis tomarlas de primer plato, o bien como plato único (tal cual o con una cucharada de arroz blanco por encima).

Ingredientes (para 4-6 raciones):

  • 350 gr de lentejas (pesadas antes de remojar)
  • 1 puerro o cebolla
  • 1 pimiento, zanahoria, media berenjena, medio calabacín… (al gusto)
  • 2 cucharadas soperas de mostaza (lo ideal es que sea de Dijon, la fuerte, pero como queráis!)
  • 1 cucharadita de tomillo
  • Perejil al gusto
  • 1 hoja de laurel
  • Pimienta
  • 1 cucharadita de sal
  • 1 chorrito de aceite
  • 750 ml de agua

Preparación:

La noche anterior (o al menos 4-5 horas antes) dejamos las lentejas en remojo en abundante agua.

Cuando vayamos a cocinar, comenzamos lavando y picando las verduras en trocitos pequeños (tal como esperamos encontrarlos en el guiso resultante).

  • Instrucciones para el modo tradicional:

Vertimos todos los ingredientes ya preparados. Cerramos la olla y la dejamos 8 minutos si es olla express y 40 si es olla normal. En la olla normal es casi seguro que necesite un vaso de agua más, ya que se va evaporando.

  • Instrucciones para Thermomix:

Vertimos todos los ingredientes ya preparados. Programamos 30 minutos a 100º, giro a la izquierda y velocidad cuchara. Cuando pase el tiempo comprobamos que estén tiernas (no duras): si les falta cocción, programamos 5 minutos más a la misma temperatura y forma.

Y ya están listas para disfrutarlas!

➡ Podéis tomarlas de primer plato, o bien como plato único (tal cual o con una cucharada de arroz blanco por encima).

➡ Se pueden congelar perfectamente. Si no, duran 5 días en la nevera.

➡ No debemos olvidar que las legumbres son uno de los alimentos más sanos, y que es muy recomendable incluirlos en nuestra alimentación semanal al menos una vez.

Que lo disfrutéis!

Chana masala (pisto hindú con garbanzos)

Buenos días a todos!!!

Uno de mis platos españoles favoritos es el pisto. Me encaaaaaanta tanto con huevo como usándolo como salsa para pescado, relleno de una lasagna o con garbanzos. Además, se puede preparar en grandes cantidades y guardar en el congelador para cuando lo necesitemos, todo son ventajas!

Por este motivo, cuando descubrí que en la gastronomía india tienen su propia versión (gracias a este libro de Deliciously Ella) no dudé en prepararlo enseguida 🙂 .

Es verdaderamente parecido a nuestro pisto, con la diferencia de que se le añaden multitud de especias para darle el toque exótico, y que los garbanzos son ingrediente obligatorio aunque podéis suprimirlos si así lo deseais 🙂 .

Os recomiendo acompañarlo de arroz blanco, sin duda. La autora lo cuece en leche de coco y agua en lugar de solo agua, yo lo hice así y la verdad es que es BRUTAL.

Sirve como plato único, ya que los garbanzos contienen suficiente proteína de calidad, no necesitamos completarlo, si no queremos, con carne o pescado.

VAMOS!!!

Ingredientes (para 6 raciones):

  • 2 botes de garbanzos cocidos (800 gr en total)
  • 2 botes de tomate triturado o troceado
  • 200 gr de espinacas (frescas o congeladas)
  • 1 cebolla o puerro
  • 5 dientes de ajo
  • Especias: 2-3 cucharadas soperas de pasta de curry (OJO, pasta concentrada, no salsa) o de curry en polvo
  • 1-2 cucharaditas no muy llenas de sal
  • Aceite de oliva
  • Opcional para servir: cilantro fresco picado y/o guindilla fresca en rodajitas
  • Arroz como guarnición

Preparación:

Pelamos y picamos cebolla y ajo.

Calentamos un chorro de aceite de oliva en una cazuela u olla express, agregamos lo anterior y dejamos pochar 10 minutos removiendo de vez en cuando.

Retiramos del fuego y agregamos las especias (sed generosos, es la gracia del plato!). removemos bien y volvemos a poner al fuego para que se tuesten unos segundos.

Incorporamos las latas de tomate y dejamos 10 minutos a fuego suave tapado.

Agregamos los garbanzos y las espinacas dejamos otros 10 minutos. Si lo veis con poco líquido, añadid un vaso de agua.

Servimos bien caliente y espolvoreamos por encima, si queremos, el cilantro y la guindilla.

Espectacular!

➡ El mejor acompañamiento de este plato es, sin duda, un arroz blanco. La autora de la receta lo cocina con leche de coco y agua en lugar de solamente con agua, imaginad qué pasada!!!