Hola amigos!
Existe un término en inglés para el que no he encontrado traducción perfecta al español: comfort food. Estas palabras hacen referencia a un tipo de comida con valor sentimental, que cuando la comemos o vemos nos inspira nostalgia. Generalmente consistente en platos contundentes que prepara(ban) nuestras abuelas o madres y que nos transportan a momentos muy felices de nuestras vidas.
En mi caso me siento así con los canelones, los calamares en su tinta, el pollo trufado, las croquetas, la lasagna… y, cómo no, con las albóndigas. Y es que creo que aunque me dedicase en exclusiva a fabricar estas pequeñas bolitas, nunca jamás estarían tan jugosas como las de mi madre y abuela, por más que he intentado hacerlas como ellas dicen, poniendo más leche, más miga, apretando menos, friéndolas… No hay manera!!! 🙂
En este blog tenéis estas 4 recetas de albóndigas, todas ellas bien diferentes:
- Albóndigas de pollo al curry con frutos secos
- Albóndigas en salsa de setas (versión normal y vegetariana!)
- Albóndigas clásicas en salsa de tomate
- Albóndigas de merluza en salsa de cebolla y vino blanco
…pero las de hoy tienen algo que las diferencia mucho de las demás, y estoy taaan contenta con el resultado!!!
Hace ya tiempo que os vengo hablando de un ingrediente que ha entrado en mi cocina este mismo año: la soja texturizada. Me parece un descubrimiento tan grande que no paro de darle vueltas a nuevas formas de darle uso, y es que son múltiples las razones por las que os animo a experimentar con ella:
- Antes que nada, para los que no la conozcais, la soja texturizada es haba de soja molida deshidratada en forma de copos que, al remojarlos, son un sustituto de la carne picada.
- La soja es legumbre, por tanto estamos introduciendo un alimento plagado de fibra, vitaminas y minerales, además de proteína e hidratos estupendos.
- Reducimos el consumo de carne sin darnos cuenta, algo que recomiendan las autoridades sanitarias cada día con más énfasis…
- Es mucho más barata que la carne (incluso que la de pollo).
- Podemos tenerla en la despensa durante meses.
- Tratándola como hay que tratarla, nadie identifica que es distinto de la carne. He probado en los pimientos rellenos, salsa bolognesa, chili con carne, boniatos rellenos, pizza mariachi y en estas albóndigas: NADIE se ha dado cuenta, de hecho lo que han preguntado es «uy pero de qué carne es esto?».
La receta es facilísima, de verdad os animo a prepararla enseguida!
Ingredientes (para 3 raciones, unas 12 albóndigas):
- 80 gr soja texturizada (la encontraréis en mercadona, herbolarios o secciones eco/bio de hipermercados, cuanto más fina mejor)
- 1 cebolla mediana
- 1 diente de ajo
- 2 cucharadas de pan rallado (aprox) o un puñado de picos
- 2 cucharadas de leche
- 1 huevo
- 1 cucharadita de sal
- media cucharadita de ajo en polvo (opcional pero muy recomendable)
- pimienta negra
- 1 tarro de tomate frito (lo más natural posible)
- aceite de oliva
- 1 chorro de agua
Continuar leyendo Albóndigas en salsa de tomate (versión sin carne)












