Hola amigos!
Evidentemente, todos sabéis que me encanta cocinar. Me pasaría horas y horas, y dedico mucho tiempo a leer recetas nuevas y pensar qué prepararé la semana siguiente.
No obstante, dado mi trabajo y en general mi vida diaria tampoco dispongo de excesivo tiempo para estar entre fogones, y por ello suelo optar por cocinar platos que cueste poco hacer y cundan mucho. En invierno esto se traduce en guisos de legumbres, y en verano en pasteles salados!
Como podéis ver en este link, el blog está llenito de ellos: de carne, de pescado, de verduras, de horno, de microondas, de nevera…
Hoy os traigo uno más para la colección. Con él disfrutaremos del maravilloso sabor del puerro confitado y la suavidad de la merluza (que puede ser perfectamente lomos congelados), y además os doy la receta para cubrirlo de salsa tártara en versión express y aligerada.
Todo esto es una receta adaptada de la escuela de cocina Hoffman. Por si de variAnity no os fiais 😉 .
Ingredientes (para 4-6 raciones):
- 2-3 puerros
- 400 gr de merluza descongelada (peso sin espinas)
- 1 chorrito de vino blanco
- 200 ml de leche
- 4-5 huevos
- sal
- pimienta
- aceite de oliva
Para la salsa tártara express y aligerada (opcional pero muy recomendable!):
- 1 yogur natural (sin endulzar; cuanto más espeso, mejor)
- media cebolla pequeña
- 3-5 pepinillos en vinagre
- 1 cucharadita de alcaparras
- pizca de sal
Preparación:
Comenzamos cortando el puerro por la mitad a lo largo y desechando la raíz y la parte verde. Lo lavamos muy bien, ya que suele tener tierra por el centro. Lo troceamos pequeño.
Calentamos un chorro de aceite a fuego medio-suave en una cazuela amplia y ponemos a pochar el puerro con una cucharadita de sal durante 15 minutos. Alternamos momentos de tapa abierta y cerrada, removiendo de vez en cuando.
Cuando esté blandito, agregamos el vino y dejamos que se evapore 2 minutos a fuego fuerte.
Agregamos la merluza descongelada y la dejamos unos minutos para que se cocine ligeramente (que se ponga blanca).
Vamos precalentando el horno a 180 grados con calor arriba y abajo.
Ahora tenemos 2 opciones, en función de si preferimos un pastel en el que se noten los distintos ingredientes, o bien si nos gusta más que esté todo triturado:
- En caso de quererlo todo triturado, simplemente deberemos pasar la mezcla de puerros y merluza a un bol (o thermomix) y triturarlo con una batidora junto con la leche, los huevos, un poco más de sal y pimienta al gusto.
- Si nos gusta notar los trocitos, batiremos a mano o con batidora la leche, los huevos, un poco más de sal y pimienta al gusto y después agregaremos la mezcla de puerros y merluza y removeremos bien con una espátula o cuchara.
En ambos casos, volcamos la mezcla en el molde que vayamos a emplear (yo utilicé uno alargado de los de bizcochos). Os recomiendo forrar el molde con papel de horno, de esta forma desmoldarlo será coser y cantar.
Metemos el pastel en el horno unos 35-40 minutos. Cuando al pincharlo con un cuchillo salga limpio, está listo. En caso contrario, lo dejamos un ratito más hasta que lo esté.
Mientras tanto podemos ir preparando la salsa tártara. Simplemente debemos picar con un cuchillo todos los ingredientes muy pequeñitos y mezclarlos con el yogur.
Dejamos enfriar el pastel (primero, a temperatura ambiente, y después en la nevera ya que se toma frio). Desmoldamos cuando esté frio y servimos con la salsa tártara por encima y junto a una ensalada sencilla.
➡ Se conserva en la nevera perfectamente 4 días. Estos pasteles no quedan bien descongelados (en cuanto a textura).