Hola amigosss
Recientemente me regalaron una latita de aceite de trufa suuuuper gourmet (esas cosas que de vez en cuando caen en cestas de Navidad, jejeje). Pensando qué hacer con semejante delicatessen y considerando que cada vez que me ponen este aceite en un restaurante me sienta fatal, investigué por las redes y descubrí lo siguiente: lo que ponen en los restaurantes (salvo rarísimas excepciones) es en realidad un aceite de aroma sintético (procedente del petróleo) que efectivamente es indigesto a más no poder.
Doy fe de que así es, porque este untable que hoy os propongo no tuvo ningún tipo de efecto secundario en mi digestión… es súper sabroso, de sabor intenso e inesperado, y facilísimo de hacer!
El aceite de trufa que vale la pena es aquel cuya lista de ingredientes indica «aceite de oliva virgen extra y trufa al 2%». Simple y llanamente. Como os podéis imaginar, no es algo especialmente económico, la trufa es algo muy difícil de conseguir y por tanto, aunque el aceite lleve poquita, un bote pequeño no baja de los 10 euros. Eso si, se trata de un ingrediente que se usa en muy pequeñas cantidades y ocasiones, podéis tenerlo un año perfectamente o comprarlo para compartir con alguien.
El untable lleva otro ingrediente que he descubierto recientemente. Más bien, lo que he descubierto ha sido el uso que hoz le vamos a dar. Estos hablando de las setas deshidratadas y trituradas hasta convertirlas en harina, para emplearlas como potenciador del sabor natural. Es ESPECTACULAR, sin duda pienso hacerlo más a menudo o porque sube el tono de cualquier guiso un montón… Se recomienda no triturar mucha cantidad para evitar que se pierda el aroma, y en mi caso empleé boletus y shiitake deshidratados que compré en Aldi hace tiempo.
Animaos a experimentar con esta receta, os chupareis los dedos}}}
➡ Y… en el caso improbable de que sobre… podéis calentarlo, añadir más agua y emplearlo con salsa para pasta!!!














